La importancia de los fideicomisos en la planificación financiera

En tiempos de incertidumbre económica es fundamental conocer las opciones existentes para una planificación financiera, con objetivos tanto a corto como a largo plazo para gestionar fructuosamente ingresos, ahorros o inversiones. En este encuadre, toma gran relevancia el uso de fideicomisos, al ser una herramienta para proteger y gestionar bienes, con gran flexibilidad. 

La estabilidad económica  es una de las búsquedas de las que más perseguidas y de las que se aspira encontrar. De acuerdo a la actividad, empresarial o personal, tiene por detrás distintos propósitos, de acuerdo a los lineamientos que se establecen. 

Bajo este parámetro, se establecen diversas opciones para llegar a cumplir con este tipo de objetivos económicos para una estabilidad. Uno de ellos es poner tener un fideicomiso financiero, que tiene diversas aristas para explorar y encontrar la opción que encaje con esta planificación ideada y alcanzar el resultado querido, y estableciendo un análisis financiero actual, objetivos, presupuesto y deudas a saldar, si existiesen y tipo de ahorros a invertir. 

Planificación financiera: de un ideal a un resultado

Al hablar de una planificación financiera se debe conectar directamente con una palabra: estrategia, ya que sintetiza uno de los factores fundamentales para ponerla en marcha.  A partir del trazado de los objetivos a alcanzar, se puede establecer los lineamientos de acciones para lograrlos en un proceso continuo para sumar tanto metas a lograr y sus resultados. 

La toma de decisiones es uno de los primeros pasos para lograr maximizar los recursos que se deben administrar. Para ello, es importante un análisis al respecto. Se deben identificar un número de pasos al momento de iniciar con este proyecto financiero: definir metas, revisar gastos e ingresos, elaborar un presupuesto, trazar un objetivo de ahorro mensual, controlar las deudas y revisar el plan y realizar ajustes. 

Esta estrategia financiera se puede entrelazar con distintos instrumentos existentes, creados con este tipo de fines económicos. Uno de ellos es realizarlo a través de un  fideicomiso. 

El fideicomiso 

Es una de las herramientas jurídicas financieras distinguidas por su flexibilidad, ya que puede ser adaptado tanto a las necesidades de quien lo brinda como del beneficiario, buscando las mejores opciones de gestión de los recursos. 

Se realiza entre partes, que puede ser una entidad financiera como bancos. Tiene como objetivo una inversión para una posterior recaudación o participación en un proyecto. Para ponerlo en ejecución se necesita la intervención de tres partes: fideicomitente, fiduciario y beneficiario, todos ellos pueden ser una persona física o jurídica, y su elección es libre. 

Mientras que el fideicomitente corresponde a quien crea el  fideicomiso y aporta los bienes o activos, y define los lineamientos que se realizan en la inversión y gestión. El fiduciario es quien gestiona la transacción y es el responsable de buscar el mejor interés, es el responsable legal. 

En cuanto al beneficiario, que como su nombre lo indica es quien recoje los resultados de esta acción financiera, pueden ser personas, entidades benéficas o el fideicomitente. 

El fideicomiso y sus opciones

Al acceder a tener un fideicomiso en cuanto a la planificación financiera, se puede elegir entre distintas opciones de acuerdo a la situación que lo amerita, teniendo en cuenta los recursos y el fin buscado. Desde una planificación patrimonial, que corresponde a la administración de herencia, proyectos empresariales, relacionados con la búsqueda de organizar financiamientos, en el que se tenga una buena de la distribución de ingreso, como así también se puede utilizar para la protección de activos, en el que se busca preservar bienes ante posibles demanda legal o fiscal. 

Los tres fines que se pueden obtener al poner en marcha esta herramienta financiera tienen como objetivo principal preservar los bienes, obtener un rédito de ellos y trazar un lineamiento respecto al un equilibrio económico para el que se establecieron objetivos. La finalización de esta herramienta llega al momento de cumplimiento de los tiempos estipulados en el contrato respecto a las condiciones del mismo, por la renovación o causales indicadas previamente. 

Entre los resultados que se le atribuyen a este instrumento es la posibilidad de reducir cargas fiscales, protección del patrimonio, control en la distribución de los activos a través del tiempo. Es importante destacar la flexibilidad de este instrumento para tener en claro que su uso es de gran relevancia en la planificación financiera en la actualidad, debido a la inestabilidad económica que se vive actualmente en diversas partes del mundo.