En periodos de crisis e inestabilidad financiera, la planificación financiera se transformó en un instrumento esencial para la conservación del patrimonio. La administración del capital para incrementar su valor y asegurar su preservación se volvió en una necesidad.
Estas herramientas financieras generalmente se emplean tanto con patrimonios grandes como con los de menor valor. No obstante, la planificación para los bienes de múltiples generaciones es esencial para la preservación y transferencia futura de la familia, teniendo en cuenta que las decisiones se tomarán en el presente y el futuro.
De la conservación a la organización: la importancia de un análisis en conjunto
En la era digital, la gestión de patrimonios brinda más opciones para la planificación financiera de bienes. Sin embargo, el análisis del escenario para la toma de decisiones es crucial como primer paso.
Puntualmente, al hablar de un patrimonio familiar multigeneracional este paso implica un análisis y visión del legado que la familia – a largo plazo- quiere preservar, teniendo en cuenta tanto los valores como las metas para alcanzar, como las prioridades de la generación. Con una puesta en común con los integrantes.
En este punto, otra estrategia importante para aplicar es educarse financieramente para tener los conocimientos necesarios para una gestión, ya que las mayores pérdidas en el área es por la falta de información al momento de tomar decisiones.
Invertir tiempo en una preparación, en todas las generaciones involucradas, es fundamental para que haya un sentido común al momento de utilizar de herramientas para direccionarse hacia los objetivos a cumplir y minimizar riesgos de pérdidas.
El legado familiar: la importancia del conocimiento hasta la planificación de estrategias
Si bien existen distintos tipos de instrumentos financieros para aplicar al momento de gestionar la preservación de patrimonios, cada uno de ellos se direcciona a distintos objetivos. Por eso, la importancia del conocimiento.
En cuanto a la planificación patrimonial multigeneracional, la creación de fideicomisos es una opción viable en este sentido. Los activos pueden transferirse con control y eficiencia a las generaciones futuras, con un aval de protección ante riesgos, ya que puede crearse con objetivos en común y garantizar ingresos.
Se trata de una herramienta puede contener diversas variables y pautas estipuladas con anterioridad, como la restricción, acceso de los herederos a los bienes ante incumplimientos de objetivos. Además, su uso reduce el impacto fiscal en la transferencia de bienes.
La diversificación se alinea a este tipo de planificación familiar, con la inversión en distintas acciones se minimizan los riesgos de pérdidas y el patrimonio no se encuentra concentrado en una sola fuente. Asimismo, se obtienen rendimientos de distintos sectores.
También, si de estrategias efectivas hablamos, es importante mencionar el gran lugar que ganó la filantropía en el sector financiero. Se combina la planificación económica con acciones benéficas, con organizaciones que tengan este objetivo.
La creación de fundaciones familiares puede convertirse en una opción viable, teniendo en cuenta que este tipo de instituciones tienen ventajas fiscales.
Por último, es de gran relevancia aplicar gestiones fiscales en las herencias y transferencias de riquezas, el asesoramiento en este aspecto puede significar la reducción de impuestos. Los planes fiscales pueden generar una mayor conservación del patrimonio familiar. La gestión de patrimonios en esta era digital ofrece más opciones para la planificación financiera de bienes. Sin embargo, como primer paso es importante analizar el escenario para la toma de decisiones.